Por la gracia de Dios: el abuso de menores y la lucha por la verdad
La línea que separa la ficción del documental se va tornando cada vez más delgada y difusa. Muchas veces la distancia entre el realizador y el hecho documentado se acorta tanto que es difícil reconocer realidad de relato (Morir en Madrid, Frédéric Rossif, 1962). En otras ocasiones, por lo contrario, la ficción se asienta sobre la base de alguna realidad y produce un relato que pretende mostrarse como un documental pero no lo es (Zelig, Woody Allen, 1983). Por la gracia de Dios (Grâce à Dieu), la nueva realización de François Ozon se basa en un hecho real, crea una ficción sobre este para finalizar con una mirada que pretende ser objetiva, como si fuera un documental. En este sentido, Por la gracia de Dios es mucho más que una ficción o un reality.
François Ozon es un prolífico director de culto que ha realizado numerosas películas en super 8, vídeo, 16 mm y 35 mm; sus cortos son muy apreciados. Este es su largometraje número dieciocho.
La película trata un caso real sucedido en Lyon, Francia. Un sacerdote católico llamado Bernard Preynat fue acusado de abuso y violación de menores, hechos que el sacerdote reconoce haber cometido pero cuyas consecuencias minimiza. El obispo de Lyon, el Cardenal Cardinal Barbarin, en cuya jurisdicción oficia el cura, intenta ocultar el escándalo mientras permite que el acusado siga trabajando con niños. Los nombres propios son los reales y como tales se nombran los personajes del film. El estreno en Francia ocasionó varios entredichos porque el juicio a Preynat no ha terminado aún y el Cardenal Barbarin ha sido condenado por encubrimiento, sentencia que tampoco está firme.
La película está estructurada con base en la mirada de las víctimas, quienes constituyeron una asociación civil, La Parole Libérée, creada en 2015 para llevar adelante su acusación. Alexandre, alto funcionario de la banca, François, un comerciante y Emmanuel, un hombre desocupado y confundido, son los protagonistas de la historia. Cada uno de ellos va protagonizando el relato en forma sucesiva.
El film no pretende nada más ni nada menos que dejar testimonio del delito aberrante y de su encubrimiento, como así también de la fuerza que genera la unión y el coraje cívico de las víctimas, que no parecen perseguir venganza sino evitar nuevos atropellos contra otros.
Buen trabajo actoral de Melvil Poupaud, Denis Ménochet, Swann Arlaud y Bernard Verley en el rol del cura Bernard Preynat. Completan el elenco François Marthouret, Josiane Balasko, Hélène Vincent, François Chattot, Frédéric Pierrot, Martine Erhel, Aurélia Petit, Julie Duclos, Jeanne Rosa y Amélie Daure
Un acierto la música de Evgueni Galperine y Sacha Galperine. La dirección de fotografía de Manuel Dacosse colabora con el conjunto.
La película obtuvo el Gran Premio del Jurado Festival de Berlín 2019.
Por la gracia de Dios es una película valiente y jugada, que trata un tema escabroso pero puesto en la pantalla con suma delicadeza.