La tierra en documentales

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Luego de haber visto un puñado de documentales relacionados con la naturaleza, el planeta y la vida silvestre, nos viene a la mente una sola pregunta: ¿Por qué algunos de dichos documentales terminan tomando una posición sensacionalistas? Parece que les fuera imposible expresar datos y cifras de manera objetiva sin terminar en el inevitable “tirón de orejas social”, y planteando soluciones completamente descabelladas o casi imposibles de llevar a cabo para la situación actual del planeta.

La contaminación existe, la extinción de las especies también. Y aunque son procesos que se dan de manera natural, todo indica que se potenciaron rotundamente en las últimas décadas. La concientización hoy en día, comprende una de las herramientas más importantes para combatirla. Prevenir futuros desastres es más factible que intentar solucionar los ya producidos. Pero, por otro lado, intentar que un grupo de personas cambie la mentalidad y la cultura de todo un planeta para frenar esto de manera significativa, se va de todo límite racional.

 

El dilema vivir-sobrevivir

Podemos citar muchos documentales que nos intentan mostrar todo lo que “hacemos mal como especie”. Cowspiracy (2014) es uno de ellos. Mientras muestra los hechos y las cifras, Cowspiracy es un muy buen documental informativo sobre la situación actual y los impactos ecológicos de nuestra forma de vida y nuestra dieta, sobre el planeta. Principalmente, Cowspiracy tiene como eje central derribar el mito de que el problema de la contaminación se soluciona dejando de consumir combustibles fósiles. Claramente es un factor que también influye, y lo hace en gran medida, pero el documental nos muestra que en realidad la principal fuente de contaminación es la ganadería. Si, a pesar que este concepto pueda ser extraño, la extremadamente grande cantidad de contaminantes que liberan los bovinos supera en varias veces a la contaminación producida por todos los vehículos del mundo.

El documental falla cuando, palabras más, palabras menos, nos arroja un concepto como: la solución es fácil, tenemos que dejar de comer carne. Y además lo hace de la fomra más cliché que existe: poniendo un vegano a testimoniar su experiencia de vida, contar que si se puede ser vegano y hacer deportes, y todo lo que ya imaginan. Y es en ese preciso momento, que el documental cae en un precipicio del que nunca más sale.

El hombre – como especie – se encuentra adaptado de manera natural, y desde el inicio de sus tiempos, a una dieta omnívora. Esto le ha brindado la capacidad de sobrevivir miles de años. Visto desde este punto de vista, intentar convertir al mundo entero al vegetarianismo/veganismo, suena imposible, e impráctico.

A pesar de esto, claramente existe un factor de “lujo” en nuestra dieta, que con su eliminación podríamos lograr grandes cambios. Dejar de hacer cosas solo porque nos dan cierto grado de placer, sería una solución más simple o factible de lograr y que también afectaría ecológicamente de manera positiva. El ejemplo más clásico son los restaurantes exóticos, o aquellos lugares donde se consumen ciertos “cortes” o pequeñas y delimitadas partes de determinados animales, descartando el resto (el caso más típico y conocido es el de las aletas de tiburón). En relación a esto último, un documental en el que claramente se puede ver el efecto de estas prácticas es Racing extinction.

La ¿inevitable? extinción 

Racing Extinction, documental del 2015, nos plantea un concepto bastante claro y simple: el hombre es el encargado de la extinción de especies más grande de esta era. Se prevee que en los próximos 50-100 años se extingan la mitad de las especies del planeta, y la mano del hombre sería la principal responsable. La imagen que nos muestra, desde el momento 0 del documental, es muy, pero MUY fuerte. Si no te llega al corazón en ninguna parte de las casi dos horas que dura, es que no tenes siquiera uno. Sumado a lo que transmite por su contenido, presenta una calidad de imagen sorprendente. Filmado y editado de manera perfecta, está repleto de emociones. La idea del documental se encuentra plasmada a la perfección en la pantalla, y en ningún momento recae de manera forzada en el discurso.

Además de las filmaciones y participaciones de los activistas Louie Psihoyos y Heather Dawn Rally (Psihoyoso siendo además el director del documental), como participantes principales, el documental también cuenta con la presencia de Paleontólogos, historiadores, conservacionistas, fotógrafos, y una buena cantidad de científicos de varios ámbitos, que le dan una mayor objetividad y peso a los datos mostrados.

Si hablamos sobre el poder destructivo del ser humano, sin lugar a dudas Terra es un documental increíble al respecto. Utilizando como marco el “camino evolutivo” del planeta, y salido este mismo año, Terra nos va mostrando como luego de millones de años de lenta evolución y equilibrio natural, al hombre solo lo tomó unos cuantos miles de años dominar y destruir este fino pero exacto equilibrio. En ningún momento Terra dice cosas que no sepamos, solo dice cosas que no queremos escuchar.

El documental, a través de la fantástica y llena de emoción voz de Vanessa Paradis, irá transmitiendo mediante una especie de relato en la que la narradora se pone en posición de “ser humano” y habla por toda la especie, especie que con el correr de las generaciones, fue evolucionando y alejándose de su naturaleza más “salvaje” por así decirlo. Alejándose de la naturaleza misma. Alejándose de SU propia naturaleza.

El hombre se convirtió en comerciante. Todo lo que hace lo hace por obtener una ganancia, sin importar que a la larga o a la corta, esto afecte a su propia especie, y sin dudarlo, al resto de las especies del planeta. Nuevamente, la velocidad con la que el hombre se convirtió en el factor determinante, tanto de manera directa como indirecta, en la extinción de las especies que conviven con él, se hace eje del relato. De principio a fin, y como destacamos en el documental previo, la imagen y fotografía es FABULOSA. Si, así con mayúsculas. La musicalización también está cuidadosamente elegida. El relato con el ambiente alrededor, se amalgaman de manera perfecta, dando como resultado un documental muy emocionante de ver. Lleno de conocimiento, lleno de vida y lleno de interrogantes y verdades, sin dudas es un documental a recomendar.

Conclusiones finales Resultado de imagen para racing extinction

No hay mucho para decir, que no lo digan los documentales previamente citados. Incluso hay muchos documentales más respecto a la temática. Con sus altibajos, estos tres son un buen comienzo. Cada uno de ellos fue premiado de manera internacional y tiene gran aceptación por los medios y las críticas.

Es importante que a la hora de ver este estilo de documentales, tengamos nuestro propio pensamiento preformado, y sepamos apreciar el mensaje de fondo, ya que algunos (como es en el caso de Cowspiracy), deforman un poco el mensaje para beneficiar el discurso propio.

El mundo es uno solo, y para bien o para mal, somos la especie dominante. La que va a decidir el futuro del mismo. El futuro de nuestro hogar. El único que tenemos. La pregunta final es la misma de siempre: ¿Qué mundo queremos dejarle a las generaciones que vengan por detrás?