Reseña: River – 1º Temporada: El antihéroe, de la oscuridad hacia la luz
Stellan Skarsgard se pone en la piel de John River, un policía que se mueve por sobre el frágil margen que existe entre la cordura y la locura.
River es una miniserie protagonizada por el actor Stellan Skarsgard y la actriz Nicola Walker, John River y Jackie “Stevie” Stevenson, una pareja de policías que se encuentran a bordo de su vehículo comprando hamburguesas en un local al paso. Stevie le recrimina a su compañero por ser tan serio y acartonado, él aduce su comportamiento a su origen étnico; la acción transcurre en Londres, una ciudad que adoptó al protagonista, sueco de nacimiento y llegado a Inglaterra durante su infancia. La mujer pone música en la radio mientras deambulan por las calles londinenses; en una secuencia de inicio sublime, suena el tema “I love to love (But my baby love to dance)” de Tina Charles.
Narrativamente esta secuencia presenta dos funciones, por un lado contrapone ambos personajes, masculino duro, parco, poco expresivo, y femenino romántico, carismático y amante de la vida; y por el otro lograr que todo espectador, hombre o mujer, se enamore perdidamente de Stevie, la identificación positiva con este personaje es tan grande y tan bien lograda en escasos minutos que me atrevo a decir que es una de las mejores que he visto hasta el momento.
I see dead people
Cuando termina el tema musical, ven circulando frente a ellos un Mondeo azul que, por la conversación entre ambos, el espectador descubre que está involucrado en un caso que se encuentran investigando. El automóvil estaciona frente a un mercado y su ocupante se dirige hacia allí; River baja de su vehículo y sigue los pasos del conductor. De inmediato se origina una feroz persecución a pie en la que el supuesto delincuente termina muerto. Al finalizar esta nueva secuencia nos damos cuenta de que Stevie, quien servía de apoyo a River durante la persecución, también se encontraba muerta, con un tremendo agujero de bala en la cabeza.
Durante los seis episodios que dura la miniserie, River se encontrará investigando el asesinato de su compañera por el conductor de un Mondeo azul que se dio a la fuga varios días atrás.
Lejos de caer en lo sobrenatural, la miniserie plantea al personaje masculino como alguien que está siempre al borde de la locura, el espectador no logra descifrar si River ve gente muerta o sufre de esquizofrenia, dado que los aparecidos están siempre relacionados con su persona de una u otra forma, y los datos que aportan son conclusiones, expresadas por ellos mismos, pero obtenidas a partir de la investigación que realiza el protagonista.
Una rica gama de personajes
Dentro de la comisaría aparecen varios personajes que funcionan como ayudantes y oponentes.
Las fuerzas antagónicas se encuentran representadas por Marcus McDonald, el comandante, quien tiene decidido deshacerse de River por considerarlo inestable y cercano a la locura; y por Chrissie Read, su capitana, quien lo defiende a toda costa porque es el mejor investigador del departamento. También hacen su aporte Rosa Fallows, la psicóloga de la policía, encargada de evaluar al protagonista; e Ira King, su nuevo compañero.
Del lado de la investigación los principales son aquellos que pertenecen a la familia de Stevie, quienes luego de conocerlos el espectador se entera que la consideraban una verdadera maldición. Su madre, sus dos hermanos y su tío, todos relacionados con actividades delictivas, que ven a la única representante de la Ley de la familia como una amenaza constante.
Los personajes secundarios más interesantes, y los que dan su toque colorido a la historia, son aquellos que se aparecen ante River durante los distintos episodios, encabezados por Thomas Cream, el “Envenenador de Lambert”, famoso asesino británico del siglo XIX, encargado de sacar a la luz el lado más oscuro del protagonista. Este personaje se relaciona con John River debido a que, al inicio de la serie, el policía aparece leyendo el libro que narra su biografía. En cada capítulo surgirán otros personajes fallecidos relacionados con el avance de la investigación.
Un camino hacia la redención
Lo más atractivo de la mini serie no es la investigación en sí misma, ni el descubrimiento del verdadero asesino de Stevie; de hecho un espectador aficionado a los policiales puede llegar a suponer quién fue luego de tener expuesta toda la gama de personajes, y su detención en el último capítulo no será una sorpresa. (Luego de verla completa, considero que tampoco fue la intención de sus realizadores mostrar el descubrimiento del verdadero asesino como algo tan sorpresivo). El crimen de Stevie sirve de pretexto para que el espectador acompañe el camino que realiza su protagonista, un personaje que vive en la oscuridad por voluntad propia, y que gracias a sus dos compañeros, Stevie e Ira, logrará la salida hacia la luz.
Las últimas palabras de Stevie hacia River serán – Púdrete, Mr. Magoo -. En una conversación con Ira, el protagonista reconocerá no tener idea de quién es ese hombre. Ira, que representa la admiración ciega hacia su compañero, explicará que se trata de aquel personaje de los dibujos animados que no veía porque no usaba anteojos, no porque fuera ciego. John River vive en la oscuridad porque quiere, no porque no pueda salir de ella.
A lo largo de los seis episodios saldrán a la luz muchas verdades relacionadas con todos los personajes de la historia; todos los interrogantes secundarios que se abren serán debidamente respondidos ante los ojos del espectador. En el clímax de la narración River descubrirá quién era Stevie en realidad, pero también se descubrirá a sí mismo, abrirá su corazón a la vida y, aunque parezca que ya es tarde, obtendrá por recompensa el saber que siempre hay motivos por los cuales seguir adelante.