Cómo hizo Mad Max: Fury Road para hacer una gran persecución de autos de 2 horas
A pesar de haber tenido 3 películas en su haber, la saga de Mad Max decidió agregar una nueva entrega, pero no una del montón, Fury Road tiene la particular característica de ser una película inubicable cronológicamente dentro de la serie, algo rarísimo cuando hablamos de una franquicia, más en la época donde las películas serializadas parecen salir frecuentemente sin demasiado juicio, simplemente para expandir y dilatar una historia y darle un carácter épico. Sin embargo, unos fantasmas del pasado es lo único que necesitamos para contextualizar a Max, porque Fury Road se vale por sí misma, no necesita del soporte que puede proporcionar una precuela, Fury Road está hecha para que pueda ser vista por cualquiera, es una saga que tuvo su última entrega 30 años atrás, por eso es que es una jugada inteligente el hacerla tanto para fanáticos como para espectadores casuales. La cinta está dirigida por George Miller, que tiene el poco común merito de ser el director constante durante toda la saga, Mad Max no es lo único que Miller tiene en su filmografía que valga la pena, pero acá demuestra todo su amor a una de sus creaciones más famosas.
Pero siendo la cuarta entrega de una saga cabe preguntarse: ¿Fury Road es original?, sí, es original y no sólo dentro de la saga, es original sobretodo en relación a la mayoría de las películas, desde su planteamiento simplista desde lo argumental, el cual es compensado con una maestría en narrativa visual clásica. Cuando la analizamos, nos damos cuenta de que la película (si bien siempre se mantiene dentro del lenguaje clásico) es menos simple o vulgar de lo que puede parecer en primera instancia al ojo desatento. Habiendo tantas personas que frente a una película se preocupan por el argumento, buscando una “historia original”, llega Fury Road y demuestra que nada de eso hace falta si el resto está bien hecho, con una premisa simple como pocas. El hecho de que la trama básicamente consista en que los personajes vayan de un punto A hasta un punto B, para luego volver al punto A, ya fue víctima fácil de chistes en internet, como este poster customizado para darle un título más honesto en relación a la trama:
Con un guion tan simple era verdaderamente un desafío hacer, no sólo una película que no aburriera, sino una que entretenga tanto como lo hace Fury Road. El record por la persecución de autos más larga de la historia del cine lo tiene Gone in 60 Seconds (1974), con una secuencia que dura nada menos que 40 minutos. Si bien Fury Road no tiene acción totalmente de corrido porque se toma algunos breaks, sí la tiene de principio a fin, así que dependiendo la flexibilidad del record, si contaramos todas las persecuciones de Fury Road como una sola y gran persecución, esta Mad Max sería la nueva campeona por lejos. Pero a diferencia de Gone in 60 seconds, Fury Road fluctúa entre momentos de acción y reposo constantemente, lo que la vuelve sumamente ágil, le da tiempo a la mente del espectador de entretenerse pero también de descansar, ya que estas secuencias de reposo tampoco están sobrecargadas de extenso drama ni diálogos que requieran demasiado seguimiento, es incluso una película que podría entenderse sin dialogo en absoluto, eso hubiera sido una cosa (aun más) increíble de ver.
Otra pregunta que cabría hacer es: ¿cómo mantener la película entretenida si casi no hay otra cosa que persecuciónes de vehículos durante 2 horas? El secreto está en saber dirigir la atención del espectador, para esto, Miller básicamente orquesta los planos, encadenándolos para que el espectador no tenga que recorrer el cuadro con la vista, así tiene tomas de rápida lectura, que le permiten un montaje ágil y de fácil comprensión. Esto lo logra encadenando planos de 2 maneras, una en la que compone todos los objetos de interés en el centro del cuadro, así el espectador siempre tiene lo que necesita ver justo delante de los ojos. La otra forma es reacomodando los objetos de interés mediante los movimientos de los actores y objetos, Miller mueve constantemente los ejes entre los personajes, si necesita mover nuestra atención de un lado a otro del cuadro entre distintos planos sucesivos, seguramente tengamos un personaje o una acción que cambie de un sector del cuadro a otro y nos guíe la mirada hasta donde ésta debería estar puesta en la próxima toma. Esto vuelve a las secuencias sumamente dinámicas y a la vez manteniendo claras la relaciones espaciales, sin caer en los aparatosos e innecesarios movimientos de cámara que se desgastan como recurso y que utiliza, por ejemplo, el polémico Michael Bay.
Podemos ver algunos ejemplos de esto en el siguiente video:
La genialidad visual de la película puede verse en la (particularmente abundante) cantidad de imágenes de este artículo, esta calidad visual corre por cuenta de la dirección de fotografía sumado a la locura que es el despliegue de la dirección de arte, principalmente en la customización de los vehículos y también en la vestimenta, destacando el diseño de Immortan Joe, a tal punto que su máscara terminó siendo más genial que su personalidad. SPOILER: Uno de los puntos que tal vez puede resultar algo decepcionante es la rápida muerte de Immortan Joe, tan rápida que de hecho Furiosa lo elimina casi sin que éste pueda poner resistencia, simplemente se acerca al auto y le arranca la mandíbula sin mayor problema, genial visualmente, pero es un final un tanto decepcionante para un autoproclamado mesías con una de las mejores y más mortales mascaras vistas en el cine.
Parte de esa genialidad visual antes mencionada es gracias a que en la filmación prácticamente no hubo utilización de croma (pantalla verde), cosa que en la actualidad es algo harto común en todas las películas de amplio presupuesto como ésta. Por supuesto que tuvo retoques digitales, pero no más de lo justo y necesario, siempre que se podían usar efectos prácticos, Fury Road los usó. Acá les dejamos una comparación entre el antes y el después de la postproducción de la cinta, donde confirmamos que gracias a la utilización de efectos prácticos, la película era genial ya desde su material en crudo:
Por supuesto que la cinta no es perfecta, a pesar de que ya dejamos en claro que el guion no fue pensado para ser el fuerte de la película, podría ser mejor, a pesar de que esto no es realmente necesario para esta película en particular. Algunos se quejaron del poco protagonismo de Max, que se vio algo avasallado por Furiosa, pero ¿quien dice que el personaje principal tiene que ser el favorito? Otra observación que se puede hacer es que, en relación a la mayoría de las películas que vemos habitualmente, los personajes casi no tienen trasfondo, excepto por los fantasmas del pasado de Max y las muy breves historias que los protagonistas cuentan. Sus motivaciones están claras, pero no más que lo justo y necesario, ya que el guion utiliza sólo los elementos básicos e indispensables, a partir de ahí, desarrolla todo. No se trata de sumar ingredientes a la receta, sino de saber incorporarlos en la medida justa, manejarlos y exprimirlos lo mas adecuadamente, es por ello que sería injusto criticar estos aspectos de forma negativa. Todo en Fury Road está al servicio del desarrollo de la acción, con semejante despliegue visual no necesita ahondar en lo argumental, se decidió abarcar poco y apretar mucho y el resultado es indiscutible. Así y por todo esto es que Mad Max: Fury Road se convirtió instantáneamente en una de las mejores películas de acción de los últimos años.