Recomendadísima: One-Punch Man

Decidió convertirse en héroe por diversión, pero ahora está aburridísimo. Se volvió tan fuerte que ya no tiene chiste.

Con un solo golpe, Saitama salva la ciudad… Y quizás también la imagen del anime. Porque One-Punch Man resalta lo mejor de esta camada de animación japonesa, y también rompe un poco con lo que ya estamos hartos de ver.

One-Punch Man, «el hombre de un solo golpe», comenzó como un webcomic amateur, pero ganó tanta popularidad en internet que se contactó al autor para convertirlo en un manga serializado y posteriormente en anime, a cargo del estudio Madhouse. No es difícil entender por qué la historia gustó tanto: en primer lugar, como el nombre lo dice, tenemos a un héroe que puede vencer a cualquier oponente con un solo golpe. Esa premisa tan simple despierta del todo la curiosidad cuando vemos al héroe en cuestión. Ni un extraterrestre, ni un gigante, ni una mutación genética; no, el hombre más fuerte del mundo es este calvito.

Mezclando comedia con acción y ciencia ficción, nos encontramos en un futuro más o menos postapocalíptico  donde las ciudades y la gente persisten con aparente normalidad, pero hay monstruos por todas partes. Saitama, nuestro protagonista desencantado de la vida, siente la adrenalina al salvar a un niño y decide retomar su sueño infantil de ser un héroe. Tras tres años de entrenamiento, es ahora el hombre más poderoso de la Tierra, pero se encuentra igual de desencantado: no hay batalla que le presente un desafío, ya que con un golpe hace caer a cualquiera. De nuevo no siente entusiasmo por nada. Es así que vive en un constante aburrimiento, al menos hasta que (más por casualidad que otra cosa) le salva la vida al joven cyborg Genos durante una batalla. Impresionado por el poder de Saitama, Genos decide convertirse en su aprendiz, y desde entonces ambos siguen un muy particular camino de heroísmo.

Uno de los puntos más fuertes de One-Punch Man son sus personajes. La serie parece haber decidido burlarse a fondo de los estereotipos del anime y poner el énfasis en otros aspectos y situaciones. Saitama lleva un buen tiempo salvando a la ciudad, y sin embargo nadie sabe quién es. Su apariencia sencilla y su traje poco imaginativo hacen que la gente no tenga demasiado interés por él, o hasta que piensen que se roba los méritos de otros. Ni siquiera cuando los villanos sí se interesan y quieren saber cómo ha obtenido tanta fuerza se le presta verdadera atención: lo único que Saitama ha hecho fue entrenar, es decir, hacer ejercicio. Pero nadie le cree, lo que también le produce cierto nivel de frustración. Genos, por otro lado, gana una rápida popularidad (cara bonita, voz sexy, pasado traumático y otros imanes de fangirls), pero su aprendizaje junto a Saitama es muy diferente al que espera (no habiendo hecho más que ser constante con el ejercicio, Saitama no tiene la menor idea de qué enseñarle al cyborg). Y así como con ellos, encontramos estos matices hilarantes en otros personajes, como Speed-O-Sound Sonic, un ninja andrógino de nombre redundante que se ha obsesionado con ganarle a Saitama, y Mumen Rider, un héroe en bicicleta que en realidad no tiene ningún poder, pero que va de todo corazón a donde se necesite ayuda, ya sea luchar contra un monstruo contra el que no tiene la más mínima oportunidad o bajar un gato del árbol. La línea épica se mantiene, sin embargo, mientras los personajes interactúan, ya que las ciudades de este nuevo mundo nunca están a salvo, y para bien o para mal ellos las defienden.

one-punch-man-episode-9-major-spoilers-from-manga-genos-fate-in-unyielding-justice

La animación de la serie es muy buena, al igual que el soundtrack y las voces. Esto se nota sobre todo en las escenas de pelea (constantes, ya que no es raro que en un solo capítulo caigan varios enemigos), que fluyen desde diferentes ángulos y garantizan dejarnos con los ojos pegados a la pantalla. Un nivel respetable se mantiene también en escenas menos cruciales –cada parte de la bicicleta de Mumen Rider, por ejemplo, está perfectamente animada. Algunas partes del guión parecen un poco forzadas, pero no restan a la historia, ya que los episodios en conjunto funcionan muy bien y es notable el trabajo detrás de éstos. Incluso villanos que apenas van a tener dos minutos de tiempo en escena  se mueven y tienen un trabajo de voz como si se tratara del enemigo final, lo que suma muchísimo al espíritu de la historia y, además, contribuye a lo entretenido de la premisa inicial: a ese monstruo enorme, también lo derrotaron con un solo golpe.

One-Punch Man tiene su fama bien ganada. Si están buscando una serie de acción divertida, con trabajo encima y sobre todo original, esta vez sí se puede decir que cumple con todos los requisitos.