Reseña: She-Ra y las princesas del poder
Adora, la hermana gemela de He-Man, pisó fuerte en los 80 y, por suerte, lo hace ahora también en la plataforma de streaming más popular. DreamWorks Animation posee los derechos de Masters of the Universe, desde el año 2012, por lo que produjo este increíble reboot para Netflix.
La serie cuenta con 5 temporadas y un total de 52 episodios, a cargo de la dibujante Noelle Stevenson y un cast de voces que supo comprometerse de lleno con cada uno de sus personajes, como lo son Aimee Carrero (Elena de Avalor), AJ Michalka (Steven Universe), Karen Fukuhara (Suicide Squad, The Boys) y Marcus Scribner (Black-Ish), entre otros.
A lo largo de sus temporadas tuvo actores invitados de mucho reconocimiento como Sandra Oh, Melissa Fumero o Geena Davis.
Para los que no están relacionados con She-Ra, básicamente la historia es así. She-Ra and the Princesses of Power es un show de televisión animado que estaba enfocado en atraer un público femenino, en base al éxito de su hermano mellizo, Adam (He-Man). La serie fue inspirada en la línea de muñecas de Mattel y tuvo el éxito que aspiraba, pero también atrajo a los fans varones de He-Man.
Pero para el reboot que Noelle Stevenson tenía pensado hubo varios cambios. Primero, no se nombra a He-Man ni de casualidad. Es la historia de Adora sin necesidad de que su hermano la opaque.
Luego, en varias entrevistas, Stevenson remarcó las diferencias físicas entre una princesa y otra, ya que la serie original estaba basada en una línea de muñecas, siendo todas iguales físicamente.
La transformación de Adora en la mujer más poderosa del planeta empuñando la espada de Grayskull también fue modificada por un diseño muchísimo más ligero y cómodo para luchar. La versión original tenía una falda y un escote bastante ajustado pero en esta ocasión viste unas calzas y una túnica que cubre el torso.
También hay que aclarar que en la versión actual, tanto Adora como el resto de las princesas son jóvenes, a diferencia de la primera versión donde ya eran adultas.
Por el honor de Grayskull
Adora (Aimee Carrero) es una soldado que fue criada por la Horda, o sea, los malos de la historia que están empecinados en gobernar Etheria. Adora fue entrenada para ser Capitana de la Fuerza y pelear contra las princesas, ya que eso les enseñan en la Zona del Terror. Las princesas son enemigos mortales y muy peligrosas. Hasta que junto a su mejor amiga Catra (AJ Michalka) se pierden en el Bosque Susurrante y Adora tiene un primer encuentro con la Espada de Protección y con Glimmer (Karen Fukuhara), princesa de Luna Brillante y Bow (Marcus Scribner), mejor amigo de Glimmer.
Adora no tarda en darse cuenta de que, en realidad, ella juega para los malos y que todo lo que alguna vez le enseñaron estaba mal o tenía malas intenciones. Así es como nuestra protagonista decide abandonar su hogar para encontrar su lugar entre las Princesas, a las cuales, ahora pertenece. Deja todo atrás, incluida Catra, quien toma su puesto de Capitana en las fuerzas de Hordak (Keston John) y Shadow Weaver (Lorraine Toussaint).
La montaña rusa de emociones entre amor y odio que van a desarrollar ambas a lo largo de las temporadas es uno (si no es el más) de los puntos más fuertes del arco argumental que nos presenta la historia. De amigas inseparables a enemigas mortales a…¿?
La carga de ser héroe
Es así como a lo a largo de las primeras temporadas, vivimos junto a Adora un crecimiento que no estaba en sus planes y es el de ser la heroína de la historia; el manejo de la espada y cómo sus emociones la conducen a convertirse en She-Ra, cuando sus amigos están en peligro o amenazados. Adora siente la obligación de restablecer el orden y volver a reunir a la Rebelión, pero para eso debe convencer al resto de las princesas.
Sin entrar en detalles que pueden resultar spoilers, el final de la cuarta temporada nos sorprendió con una She-Ra que rompe la espada en pedazos para evitar que se use con malas intenciones. Glimmer y Catra son abducidas por un Horde Prime que, hasta el momento, no sabíamos sus intenciones para con Etheria.
Sin la espada, ¿hay heroína?
La quinta temporada, estrenada el pasado 15 de mayo, se compone de 13 capítulos y es la temporada final (lamentablemente).
Adora tiene una lucha interna consigo misma luego de romper la espada para que no se use con otros propósitos, lo que la mantiene bloqueada de convertirse en She-Ra.
En esta ocasión, se pone bajo el foco, una Adora intentando luchar con sus capacidades y cualidades humanas, pero sin She-Ra, se le complica. Los primeros cinco episodios se centran en la búsqueda de la magia interior de Adora y su motivación para convertirse en She-Ra, su anhelo de salvar a sus amigos y su capacidad de perdonar a quien más la dañó: Catra.
La guerra con Horde Prime lleva a nuestra heroína al espacio junto a Bow y Entrapta (Christine Woods), para rescatar a Glimmer. Lo que el equipo no sabía era que Catra también está en la nave del villano. Pero sin She-Ra, sin poderes y jugando de visitante, tiene todas las de perder.
Tanto Glimmer como Catra o Entrapta son personajes que tuvieron actos bastante egoístas a lo largo de los episodios, aunque Catra claramente se lleva el primer puesto, por lo que buscará la redención de sus amigos a lo largo de los 13 episodios.
Es clara la intención de Stevenson para con el argumento final y es la redención de la villana, Catra en este caso. Para aquellos fans de las series animadas, no se veía un arco de redención tan bien expresado desde el príncipe Zuko en Avatar: La Leyenda de Aang (que por cierto también está disponible en Netflix).
El resultado de estos 52 episodios es un coming of age perfectamente argumentado que trata temas súper delicados pero que no deja de ser una serie animada dirigida a un público de +7. Pero el eslabón más llamativo e importante es la diversidad y la representación del colectivo LGBTQ+, tan fresca y fluida que no necesita de capítulos enteros dedicados a una salida del clóset o explicar relaciones que ya damos por sentadas, otro acierto de Stevenson.
Además, tiene una animación espectacular, incluso existen advertencias para aquellas personas sensibles debido a la exposición del juego de luces y colores en ciertos episodios.
Ni hablar del humor, la serie es divertida y eso se lo debemos al cast de voces, tanto Aimee Carrero como AJ Michalka pusieron todo para moldear tanto a Adora como a Catra, pero hay que darles crédito a personajes secundarios como Scorpia (Lauren Ash), Sea Hawk (Jordan Fisher), Mermista (Vella Lovell) e incluso Glimmer y Bow. Se adapta a la visión del espectador sin alejarse de su propósito.
El final de esta última temporada generó un enorme revuelo en redes sociales y entre el fandom debido a una revelación que viene amagando desde el episodio 8 de la primera temporada.
She-Ra and the Princesses of Power está disponible en Netflix y aunque ya esté confirmado que no habrá más temporadas, el fandom, el cast y Stevenson no pierden la esperanza de que Netflix y DreamWorks puedan llegar a un acuerdo para realizar una película.