Querido señor: la carroza se convierte en calabaza a medianoche
Cenicienta o Pretty Woman, no importa cuál sea la profesión o la forma que adopte el personaje femenino, el relato romántico siempre es el mismo. Se ha repetido hasta el cansancio en las telenovelas. Él es un hombre rico o tal vez el heredero de una familia de clase alta. Ella es pobre, muchas veces proviene de abajo, pero por sobre todo, es bella. Ambos se enamoran sabiendo que es una relación inconveniente, casi imposible, pero que pasa. Normalmente Él insiste en la relación y Ella, intuyendo el dolor que le producirá el desencanto, se niega a seguir adelante. Esta es la fórmula habitual.
Querido Señor (Sir) representa una nueva vuelta de tuerca de una historia de amor imposible. Él (Ashwin) ha sufrido un “duro” golpe: la mujer con la que estaba a punto de casarse se metió en la cama de Otro, por la tanto Él dio por terminadas las nupcias y se recluye en su departamento de joven profesional de familia adinerada. Ella (Ratna) es la empleada doméstica de Ashwin, o como dice un amigo de Él, sirvienta. Entre ambos va surgiendo un sentimiento y la atracción se hace evidente. En algún punto, ambos mundos, tan distantes entre sí, se encuentran, chocan y entran en contradicción.
Este relato podría situarse en cualquier lugar del mundo en el cual las diferencias sociales existan, es decir, en todo el mundo, pero Querido Señor está filmada en India, más precisamente en Bombay. Además de las diferencias de posición económica y social, en la India hay que tener en cuenta las diferencias de castas, sistema de separación social determinado por el nacimiento.
Pese al género de relato que aborda, que podríamos pensar como un drama romántico, Querido Señor tiene una mirada muy interesante sobre la cuestión de género. La protagonista tiene muy claro que el matrimonio no solo no es su meta sino que puede convertirse en su prisión. Lo tradicional y popular convive con la modernidad en Ratna.
Es cierto que la película es un producto más de Bollywood y que aplica la fórmula segura para lograr el éxito del producto, pero también puede decirse que tanto Hollywood como Bollywood tienen matices y excepciones. En este caso los matices están a la vista: no hay buenos y malos, justos o arrepentidos y el final…
Querido Señor es la ópera prima como directora de ficción de Rohena Gena, podría decirse que el debut es auspicioso. Sabe contar una historia con trasfondo social, sin caer en el panfleto ni la altisonancia.
Muy bien Tilotama Shome en el papel de Ratna, mostrando el mundo de una mujer que tiene ilusiones pero que sabe que pasar determinados límites puede acarrearle serios problemas.
El film fue nominado en la Semana de la Crítica en el Festival de Cannes y obtuvo menciones en varios festivales europeos.
